¡Santiguame Señor Por Favor!

Miércoles de Recogimiento:

Rodrigo tras sufrir el desprecio de los Brasileromanos se apresta a iniciar su caminata hacia el desierto de Cobquecura, pero antes, hace un alto en la tierra de Alejandra, la Magdalena del lugar. Al emprender el viaje Rodrigo medita sobre lo que viene junto a sus cinco Apástoles.

Rodrigo: Padre, dame la sapiencia y habilidad para resistir los embates de Satanás, el Cacique del lugar.

Dios: No toy ni ahí.

-después de semejante desconocida- Rodrigo siguió caminando hasta finalmente llegar al lugar, bendecirlo y volver casi de inmediato a la Hacienda Camboya.


Jueves Santo:

Rodrigo, junto a sus trés apóstoles Pablo "el bueno", Ignacio "el califa" y Victor "el galán" arriban a la hacienda camboya y el maestro les dice: "Hijos mios, bendeciré el alcohol y lo multiplicaré para que corra por sus venas hacíendolos alucinar". Pablo dijo: "¿Maestro, uté va a chupareee? a lo que Rodrigo contestó: "seeeeeeeeeeeeeee".

Luego de contar las anécdotas sagradas junto a sus apóstoles, el Maestro se dió cuenta que Magdalena no era tal, era Judas disfrazado, pero logró reponerse y lo perdonó.

Viernes Santo:

Rodrigo, tras meditar todo el día esperó nuevamente la llegada de sus apóstoles a los que se sumaron Fernando "el constructor" y Juan Andrés "el panadero". Luego de iniciar nuevamente la bendición de los líquidos mundanos "el Maestro" le dice a su apóstol Víctor "el galán": "hijo mio, conocí una princesa de las tierras de San Carlos que te conoce y dice que te recuerda" a lo que el apóstol contestó: "Maestro, es un Maestro, la recuerdo".

El Maestro excepcionalmente ingirió el "líquido mundano" por largo rato, el demonio sonreía y le tretaba de imponer el espíritu de Michael jackson haciéndolo bailar como él pero Rodrigo resistió estóicamente sus embates y finalmente lo derrotó.

Sábado Santo:

...aun no transcurre (Continuará)